En medio de la transición administrativa en Ecatepec, Estado de México, el temor a perder el empleo está dando lugar a un mercado paralelo de sindicalización. Trabajadores señalan que se están exigiendo pagos de hasta 50 mil pesos para asegurar una plaza sindicalizada, mientras que las solicitudes “más mesuradas” oscilan entre 15 mil y 20 mil pesos.
Este fenómeno afecta principalmente a los cerca de 4 mil empleados de confianza que laboran en un municipio con una plantilla de 8 mil trabajadores, de los cuales solo la mitad cuenta con respaldo sindical. La incertidumbre laboral ha intensificado estas prácticas, según los testimonios de los afectados, quienes temen represalias o perder sus trabajos.
La sombra del cambio de administración
Con el reciente proceso de entrega-recepción, los nuevos titulares de la Administración municipal han asegurado que no hay planes inmediatos de despidos y que “los buenos empleados deben estar tranquilos”. Sin embargo, estas declaraciones no han sido suficientes para calmar los temores de los empleados de confianza.
Mientras tanto, el Sindicato de Trabajadores del Estado de México y Municipios (SUTEyM) asegura desconocer estas transacciones, que representan una práctica ilegal y profundamente preocupante en un contexto ya marcado por la inestabilidad laboral.
El caso de Ecatepec ilustra un problema estructural que va más allá de un solo municipio: la precariedad laboral y la falta de transparencia en la sindicalización son un reflejo de desafíos más amplios en los gobiernos locales del Valle de México.En Ecatepec, el costo de la incertidumbre laboral: hasta 50 mil pesos por una plaza sindicalizada
En medio de la transición administrativa en Ecatepec, Estado de México, el temor a perder el empleo está dando lugar a un mercado paralelo de sindicalización. Trabajadores señalan que se están exigiendo pagos de hasta 50 mil pesos para asegurar una plaza sindicalizada, mientras que las solicitudes “más mesuradas” oscilan entre 15 mil y 20 mil pesos.
Este fenómeno afecta principalmente a los cerca de 4 mil empleados de confianza que laboran en un municipio con una plantilla de 8 mil trabajadores, de los cuales solo la mitad cuenta con respaldo sindical. La incertidumbre laboral ha intensificado estas prácticas, según los testimonios de los afectados, quienes temen represalias o perder sus trabajos.
La sombra del cambio de administración
Con el reciente proceso de entrega-recepción, los nuevos titulares de la Administración municipal han asegurado que no hay planes inmediatos de despidos y que “los buenos empleados deben estar tranquilos”. Sin embargo, estas declaraciones no han sido suficientes para calmar los temores de los empleados de confianza.
Mientras tanto, el Sindicato de Trabajadores del Estado de México y Municipios (SUTEyM) asegura desconocer estas transacciones, que representan una práctica ilegal y profundamente preocupante en un contexto ya marcado por la inestabilidad laboral.
El caso de Ecatepec ilustra un problema estructural que va más allá de un solo municipio: la precariedad laboral y la falta de transparencia en la sindicalización son un reflejo de desafíos más amplios en los gobiernos locales del Valle de México.