Las mexicanas y los mexicanos tuvieron un amargo fin de año.
De acuerdo con la más reciente encuesta de El Financiero, el 38 por ciento de las personas entrevistadas reportaron una pérdida de empleo o de su fuente de ingresos, ya sea directamente o entre alguien de su familia.
De esa cifra total, el 25 por ciento reportó pérdida de empleo entre algún familiar, el 6 por ciento en su caso propio y el 7 por ciento en su caso y el de algún familiar.
Todos estos datos de la encuesta ilustran que una buena parte de la población mexicana cerró el 2020 con más pesimismo que optimismo, respecto a la economía.